2016 ha sido un año positivo en nuestro país en cuanto a donación de órganos para trasplantes, situándonos, de nuevo, como el país con mayor número de donaciones a nivel mundial, batiendo todos los récords y superando ya los objetivos marcados para 2020. Esta semana conocíamos que ya se han conseguido 43 donaciones por millón de habitantes y alrededor de 5.000 trasplantes, unos datos que «ningún país ha conseguido nunca», señalan desde la Organización Nacional de Trasplantes. Un compromiso de la sociedad que hemos querido analizar con la ONT, organismo que coordina los procedimiento de obtención y uso clínico de órganos, tejidos y células donados por los ciudadanos, y que precisamente en 2016 celebra su 25 aniversario.
Cogesa forma parte de todo este engranaje, ya que el traslado de tejidos para trasplantes forma parte de los servicios de logística biosanitaria. Por ello, hemos querido charlar con el doctor Gregorio Garrido, jefe de los servicios médicos de la ONT, para conocer de cerca cómo funciona esta institución y cuál es la situación actual de la donación y trasplantes en nuestro país.
España vuelve a ser, un año más, el país con mayor número de donaciones para trasplantes del mundo, ¿a qué atribuís este éxito?
El sistema español de trasplantes es un modelo propio de gestión, basado en tres aspectos. Por un lado, una amplia red de coordinadores hospitalarios de trasplantes, muy bien entrenados para detectar posibles donantes y pedirle a las familias su consentimiento para autorizar la donación en un momento tan complicado para ellas como es el fallecimiento de un ser querido; por otro, la generosidad de los ciudadanos españoles, que siempre responden de forma muy solidaria cuando se les da la oportunidad de salvar una vida; y, por último, un sistema sanitario como el nuestro que lo hace posible. En esencia, la clave del modelo español radica en que estamos muy bien organizados, así hemos establecido protocolos de todos y cada uno de los pasos del proceso de donación y trasplante, donde nada queda a la improvisación. Y a la vez hemos ido buscando nuevas vías para aumentar la disponibilidad de órganos, como la donación en asistolia (fallecimiento por parada cardíaca irreversible), el fomento de la donación renal de vivo o el establecimiento de una mayor colaboración entre los coordinadores de trasplantes y los médicos que trabajan fuera de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCIs).
En relación a los tejidos… ¿qué caracteriza este tipo de donaciones y trasplantes?
La donación y el trasplante de tejidos tiene algunos aspectos que la diferencian de la donación de órganos. La primera, y más importante, es que en general el trasplante de tejidos se puede programar (es decir, no es una cuestión urgente, de vida o muerte, como el de los órganos) y los pacientes que esperan un trasplante de tejidos (hueso, corneas, válvulas cardiacas, piel o médula ósea) pueden esperar a encontrar un donante o un tejido adecuado a su enfermedad. La segunda diferencia es que mientras que en el trasplante de órganos el paciente necesita el trasplante para poder seguir viviendo (excepto en el caso del trasplante renal, en el que los pacientes pueden seguir viviendo mediante la diálisis, aunque con peor calidad de vida), el trasplante de tejidos no es un trasplante vital, sino un trasplante que mejora su calidad de vida. No por ello el trasplante de tejidos es menos importante que el de órganos pero, como decía anteriormente, esto nos permite programar el trasplante del tejido y hacerlo en mejores condiciones para el paciente y con tejidos más preparados y adaptados a las necesidades del paciente. El único trasplante de tejidos que puede ser vital es el trasplante de médula ósea, o más exactamente, de progenitores hematopoyéticos (médula ósea, células madres de sangre periférica o sangre del cordón umbilical) aunque generalmente también nos permite programarlo, es decir, realizarlo en el momento adecuado para obtener los mejores resultados.
¿Qué requisitos son necesarios para ser donante de tejidos?
Básicamente, los mismos que para ser donante de órganos. Al igual que en el caso de los órganos se puede ser donante al fallecer y así se pueden donar huesos, corneas, válvulas cardiacas, segmentos vasculares (estos es, arterias y venas) o piel. En estos casos, es suficiente con no haber padecido alguna enfermedad o infección que se pueda transmitir del donante al receptor o alguna otra enfermedad que haya invalidado el tejido que se quiere donar.
Por supuesto, también se pueden donar tejidos y huesos estando vivo (sobre todo aquellos pacientes a los que se les coloca una prótesis de cadera, ya que el hueso “sobrante” se puede donar), la membrana amniótica (que es la membrana que envuelve al recién nacido) y que se puede donar en el momento del parto y finalmente los progenitores hematopoyéticos, sean estos médula ósea, células madre de la sangre periférica o sangre del cordón umbilical.
En relación a la logística implementada, ¿cuáles es el proceso que se sigue desde la donación hasta el trasplante? ¿Cómo ha evolucionado la logística de tejidos u órganos en los últimos 25 años?
Como comentaba antes, el trasplante de tejidos no es urgente y puede demorarse. De hecho, prácticamente todos los tejidos se procesan antes de poder ser implantados. Esto se lleva a cabo gracias a la existencia de un banco de tejidos, el espacio al que se trasladan los tejidos una vez han sido donados. Este banco de tejidos es el lugar en el que los tejidos son analizados y procesados (por ejemplo, se toman cultivos al tejido para descartar infección, o se le da una forma determinada al tejido), y estos pueden ser almacenados durante años a la espera de algún paciente que los requiera. Así, en el banco de tejidos podemos tener almacenadas válvulas cardiacas o huesos de un tamaño determinado (por ejemplo, para pacientes infantiles) o piel a la espera de que alguien lo necesite, en casos como grandes quemados. También en el banco de tejidos podemos “recortar” una córnea para que sirva para dos o más pacientes, y de forma semejante, se pueden procesar otros tejidos.
La evolución en estos 25 años ha sido impresionante, los bancos de tejidos han mejorado en sus instalaciones y la cualificación de los profesionales que trabajan en ellos, lo que permite aumentar la seguridad (ahora los tejidos están más estudiados y sabemos que el riesgo de que puedan dar algún problema o efecto secundario es mínimo) y también se ha avanzado en el tipo de tejidos que ofrecen –mientras que al inicio sólo se empleaba el hueso y las córneas y se implantaban prácticamente sin manipular, hoy en día tenemos múltiples tipos de tejidos y procesados de diferentes formas para que estos sean los más adecuados y ajustados a las necesidades de los pacientes-.
Celebráis en 2016 vuestro 25 aniversario, ¿Cuál ha sido la evolución en donación de órganos y tejidos en este cuarto de siglo?
Tanto en la donación de órganos como en la de tejidos, España no ha dejado de crecer en estos 25 años. Así el año pasado hubo en nuestro país 1.851 donantes de órganos, cifra que va a ser ampliamente superada este año. Algo parecido ha pasado en la donación de tejidos, habiendo alcanzado en el año 2015 casi 3.000 donantes de hueso o más de 3.600 donantes de córneas. Con la puesta en marcha del Plan Nacional de Donación de Médula Ósea es muy probable que al final de este año hayamos alcanzados los 250.000 donantes, habiendo sobrepasado ampliamente el objetivo de 200.000 donantes que se marcó en el plan.
Estas cifras en donación de órganos y tejidos tienen la consecuencia de que se hayan realizado más de 100.000 trasplantes de órganos en nuestro país y en el ámbito de los tejidos más de 400.000 pacientes hayan recibido un trasplante de algún tejido que ha mejorado sustancialmente su calidad de vida. Es evidente que los pacientes españoles son, por tanto, los que más probabilidades tienen de poder ser trasplantados.
Mirando al futuro, ¿Cuáles son los retos más importantes para vuestra organización?
Sin duda, a corto y a medio plazo hay que consolidar lo ya conseguido. Es complicado seguir aumentando los niveles de donación y trasplante pero hay que seguir trabajando en los programas implantados en los últimos años, que están dando muy buenos resultados y de los que todavía esperamos conseguir beneficios.
Pero también hay que plantearse retos. En cuanto a trasplantes de órganos, ya que estamos por encima de los 40 donantes pmp hay que seguir aumentando, sobre todo en aquellas CCAA que van un poco por detrás.
En cuanto a células madres sanguíneas y en los tejidos, hay que aumentar el número de donantes de médula ósea, así nos hemos planteado llegar a los 400.000 donantes en el año 2020, y también mediante el Plan Nacional de Córneas esperamos alcanzar los 5.000 donantes para el mismo año 2020 con el objetivo claro de alcanzar a la autosuficiencia en estos trasplantes.
Para la Organización Nacional de Trasplantes es muy importante no relajarse por los buenos resultados que estamos teniendo y seguir trabajando para conseguir que todos los pacientes de nuestro país que necesiten un trasplante, sea este de órganos, células o tejidos acaban alcanzándolo.
Si quieres conocer más sobre el funcionamiento del banco de tejidos, en esta entrevista, hablamos con el Banco de Huesos y Tejidos del Hospital Universitario Fundación Alcorcón.
hola, como va todo, en la web, http://estrasplante.com podrá ver mas publicaciones de trasplantes, le gustara leer las noticias de todo el mundo sobre los trasplantes.
Soy trasplantado renal, por segunda vez desde el año 2012, gracias al trabajo del personal sanitario puedo escribir mi bloc, http://borjarevilla.com donde cuento como es mi vida como deportista trasplantado. espero sea de vuestro interés, Un saludo