Paz Merino, coordinadora de la Unidad de Seguridad del Paciente (USP) del Hospital Can Misses, explica en esta entrevista el origen de esta unidad y el trabajo desarrollado para implementar proyectos y mejoras en la calidad y seguridad del paciente. Además, es jefa de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), y desde su experiencia y conocimiento analizamos los protocolos de humanización implantados en el centro sanitario.
Acabáis de recibir el premio Ramón Llull por vuestra iniciativa. ¿Qué crees que ha sido lo más valorado por el Govern?
Por un lado, el trabajo en equipo y la implicación de cada uno de los miembros de la Unidad de Seguridad del Paciente, y por otro, la innovación a la hora de proponer mejoras y nuevas fórmulas para comunicarnos con los profesionales, los pacientes y los usuarios en general. Cada vez se están creando más Unidades de Seguridad del Paciente como ésta, pero nosotros ya contamos con dos certificaciones importantes como la certificación de cartas de servicio, la Norma UNE 93200, la ISO 9001, que se aplica a cualquier sector, y la norma UNE 179003, exclusiva para servicios sanitarios, que acredita la correcta gestión de riesgos para la seguridad del paciente.
¿Cómo y por qué nace la Unidad de Seguridad del Paciente?
Aunque se hizo realidad en el 2012, la USP ya se empezó a valorar desde el servicio de Medicina Intensiva en el 2005, cuando surgió a nivel internacional un movimiento muy interesante de concienciación sobre la política de seguridad del paciente. Toda la experiencia adquirida desde ese momento se trasladó a todos los servicios del Área de Salud de Ibiza y Formentera en 2012 y hemos seguido mejorando cada año hasta la actualidad.
¿Cuántas personas –y qué profesionales- formáis parte de esta unidad?
En la actualidad, colaboran 27 personas de diferentes sectores del Área de Salud. Es fundamental contar con la representación de las diferentes profesiones sanitarias, para llevar a cabo un buen trabajo y velar por la seguridad del paciente. Celadores, médicos, auxiliares, enfermeros… todas las visiones cuentan. De hecho, la presencia del periodista responsable de Comunicación del Área de Salud y del documentalista es también clave en el equipo.
Tenéis en marcha un calendario con doce acciones para 2017 relacionadas con la seguridad del paciente. ¿Cuál es la prioridad número uno?
El calendario nace del consenso de todos, en las reuniones quincenales en las que comentamos y programamos cada una de las acciones en conjunto. Todas son prioritarias, pero destacaría la Escuela del Paciente por la gran importancia que tiene la participación del paciente en todo el proceso. Por ejemplo, es importante que conozca por qué debe mantener puesta siempre su pulsera identificativa, el uso correcto de medicamentos, o las indicaciones para antes de una radiografía.
A partir de esta Escuela del Paciente, han surgido 9 talleres con prácticas muy interesantes para concienciar y trasladar los mensajes de seguridad. Además, esta vez hemos ido más allá y hemos empezado a trabajar con estudiantes, parte fundamental para garantizar una buena seguridad en el futuro. Estas charlas y talleres con estudiantes están siendo realmente fructíferas, sobre todo con los trabajos en grupo que les hemos pedido y que deberán presentar próximamente a la consellera balear de Salut y al gerente del centro. Desde cómo hacer un lavado de manos correctamente hasta cómo buscar y detectar las fuentes de información fiables sobre salud, los alumnos tendrán que demostrar que son capaces de entender y transmitir ese conocimiento a los demás. Implicar a los jóvenes es una prioridad en la USP.
La cultura de la seguridad que abandera la USP, ¿es sencilla de implantar en el hospital?
Es sencillo cuando salimos fuera del Área de Salud y conseguimos llegar directamente al ciudadano, cuando traspasamos las paredes del hospital. ¿Cómo? Visitando todo tipo de centros: ayuntamientos, asociaciones, colegios… En este sentido, los talleres prácticos son imprescindibles para cumplir los objetivos y seguir mejorando.
Uno de los principales riesgos a los que se enfrenta el paciente es la proliferación de fuentes de información no fiables sobre salud.
Efectivamente, existen muchas páginas en Internet que carecen de fiablidad y el paciente está expuesto a cada vez más fuentes de información no seguras, por eso este campo está también entre nuestras principales acciones: formar a los profesionales médicos para que sean capaces de transmitir al paciente las fuentes que debe consultar según cada caso. También trabajaremos en el futuro para que toda la información sobre la seguridad del paciente esté visible en la propia página web del Área de Salud.
¿Cómo ayuda a mejorar la gestión sanitaria el entorno digital?
Nosotros le hemos sacado mucho partido. Cada vez más utilizamos herramientas que nos ofrece Internet para comunicarnos con usuarios, pacientes, familiares y profesionales. Utilizamos Twitter, Facebook, el blog… Lo que mejor nos está funcionando son los vídeos. De hecho, con el de ¿Has hecho P.I.S.? conseguimos una gran repercusión. Nuestra comunidad en redes sociales crece rápidamente pero también nos sigue funcionando mucho los mensajes claros y útiles que mostramos a los pacientes en las diferentes pantallas del hospital.
Usted es, además, jefa de la Unidad de Cuidados Intensivos, ¿Cómo se ha mejora la seguridad del paciente en este área?
En la Unidad de Cuidados Intensivos llevamos muchos años trabajando en esta materia, con un gran compromiso con los familiares, con una comunicación eficaz entre profesionales. Además, hacemos auditorías, detectamos errores y posibles mejoras, trabajando siempre en equipo.
En cuanto a la intralogística y en relación con la seguridad del paciente, ¿cómo valoráis el desembarco de Cogesa en Can Misses? ¿Qué mejoras habéis advertido en la logística sanitaria del hospital?
Hemos notado un cambio muy importante con la llegada de Cogesa. Ha disminuido la rotura del stock en todas las plantas (ahora ya nunca nos quedamos sin stock), el control de la caducidad es excelente gracias al trabajo del equipo Cogesa (algo fundamental también para garantizar la seguridad del paciente) y el control del material en tiempo real es un servicio fundamental que valoramos muy positivamente: poder pedir material en cualquier momento y ubicación es importante para optimizar los recursos y mantener una alta satisfacción de profesionales y usuarios.