Entrevistamos a Pablo Morató Robert, cirujano pediátrico del Hospital Infantil Universitario Niño Jesús de Madrid, para que nos cuente su experiencia como expedicionario colaborador en el “Programa de Atención Sanitaria Quirúrgica a la Población Infantil de Guinea Ecuatorial”, promovida por la organización Aldeas Infantiles SOS, que en 2024 realiza su 21 expedición. Cogesa colabora en el programa con el etiquetado y clasificación del material, que viaja a Guinea en container en julio de 2024, dos meses antes de la expedición, para que todo esté dispuesto en óptimas condiciones en la Aldea SOS de Bata a la llegada del equipo médico.
¿Podría contarnos cuándo y cómo se gesta este “Programa de Atención Sanitaria Quirúrgica a la Población Infantil de Guinea Ecuatorial”, que promueve Aldeas Infantiles SOS?
El inicio de este proyecto se remonta al año 2000 cuando Aldeas Infantiles SOS de Madrid contactó con el cirujano pediátrico Juan García Aroca del Hospital Niño Jesús, para valorar la posibilidad de operar a niños en Guinea Ecuatorial. El mismo año 2000 nos fuimos el doctor García Aroca, la enfermera Esperanza Mora y yo a valorar la posibilidad de operar en Guinea Ecuatorial. Tras visitar los hospitales del país, nos dimos cuenta de la imposibilidad de realizar cirugías en niños, sin garantías de éxito (falta de oxígeno, falta de esterilización, estructuras deterioradas, falta de material, …).
Nuestro lema siempre ha sido el de realizar las cosas en Guinea, tal y como lo hacemos en Madrid, y si no, no realizarlas. Los últimos días nos enseñaron la Aldea SOS de Bata, que estaba recién construida. Allí habían realizado un paritorio y una zona de hospitalización, con tres habitaciones con cuatro camas. Nos dimos cuenta de que si realizaban una serie de modificaciones podíamos crear un quirófano con hospitalización en perfectas condiciones. Y eso fue lo que se hizo; realizaron las modificaciones para asegurar la esterilidad y dotamos el quirófano, con la ayuda del Hospital Niño Jesús y de Aldeas infantiles SOS Madrid. Actualmente disponemos de una perla de quirófano en Guinea Ecuatorial.
¿Cuántas expediciones han realizado desde entonces? ¿Qué instituciones y personal están implicados para que este proyecto de atención sanitaria y quirúrgica en Guinea Ecuatorial sea posible y cuáles han sido sus resultados?
Llevamos 20 expediciones a Guinea Ecuatorial y la de este año 2024 sería la número 21. El año pasado vimos en consulta a 510 niños y operamos a 62 de 75 procedimientos. Con esto, el sumatorio desde que iniciamos esta campaña asciende a 4.790 niños vistos en consulta y 1.275 pacientes operados de 1.550 procesos. A partir del año 2021 iniciamos las expediciones anuales y las hemos mantenido hasta hoy día, a excepción de los años de pandemia. Contamos con la colaboración de Aldeas SOS Guinea y con el personal del centro de salud, que organizan la hospitalización y nuestra estancia.
Intentamos realizar cirugías que tengamos la certeza que estarán resueltas y sin complicaciones a la hora de nuestra partida. No nos parece ético dejar post operatorios complejos y complicaciones a nuestra marcha.Una de las patologías a las que damos prioridad es a las hernias inguinales, que además del gran tamaño, son potencialmente mortales en aquellas latitudes, por la falta de personal que las pueda solucionar. También operamos hidroceles, testículos intrabdominales, hernias umbilicales, eventraciones, secuelas de quemaduras, malformaciones anales, pies zambos, pie equino, etc. Habitualmente viajamos dos enfermeras, dos anestesistas, dos cirujanos pediátricos y un traumatólogo infantil.
¿Podría contarnos cómo se prepara la expedición para que el equipo médico, del que usted forma parte, pueda trabajar en condiciones lo más óptimas posibles?
El material se envía por container en barco dos meses antes de nuestra llegada. Una vez en Guinea, utilizamos el primer día para pasar consulta a más de 400 niños. El personal que no pasa consulta se dedica a desembalar, clasificar y organizar el material y a preparar el quirófano y los aparatos.
Al día siguiente, empezamos a operar a las 9 de la mañana, hasta que terminemos los 12 niños como máximo (no tenemos más camas), que suelen ser las 20/21 horas. Al día siguiente, damos de alta a los pacientes y volvemos a operar a otros 11/12 niños. El día previo a nuestra vuelta, no operamos por dos razones, una por si surgiera una complicación y no estuviéramos para solucionarla, y dos, porque hay que recoger todo el quirófano y el aparataje, para que la siguiente expedición lo encuentre en perfectas condiciones.
El deterioro con los años en esos países se hace patente y siempre intentamos que se intente arreglar y pintar por lo menos las paredes. Hacen falta aires acondicionados, que no funcionan, sábanas, toallas y pijamas para los niños, obra de fontanería en hospitalización, un esterilizador de repuesto, etc, pero a pesar de las dificultades conseguimos operar a los niños de Guinea en excelentes condiciones de seguridad.